21/Nov/2022
Autor de la Foto: https://www.pexels.com/es-es/@nikita-krasnov-5999644/
Comenzaremos diciéndote que un éclair es una pasta francesa larga hecha de pasta choux (es una masa ligera con leche, huevos, harina y mantequilla, y que por su ligereza es ideal para rellenar) relleno de crema pastelera o natillas y sumergido en fondant. Es un dulce de la pastelería clásica francesa, cuyo origen se remonta al siglo XIX. Según diversos historiadores gastronómicos, el ecláir fue creado por el pastelero de la familia real, Marie-Antoine Carême.
El término ecláir se traduce como rayo o relámpago por su forma alargada y delgada; también eran llamados "petite duchesse" o pequeña duquesa, en honor a la menor de los integrantes de la familia real. Originalmente vienen rellenos de chocolate o de crema pastelera y cubiertos con ganache de chocolate. Los tiempos han modificado la receta y ahora se encuentran de diversos sabores; rellenos de crema de café, crema de pistache o frutas y revestidos con glaseado de caramelo o cremas de licor.
Son tan deliciosos que se ven en la última cena del Titanic, como parte del postre. Otro dato curioso sobre este postre es que cada 22 de junio se celebra el Día del Ecláir de Chocolate en Francia para conmemorar uno de los postres más emblemáticos del país. Hubo un tiempo donde este postre se dejó de lado, dejó de ser interesante para la mayoría de las personas en Francia, pero volvieron a estar de moda gracias a el pastelero Christophe Adam, durante diez años jefe de pastelería de la cadena de lujo Fauchon, que decidió especializarse en los éclairs y los relanzó a partir de 2002. Abrió su restaurante y creó más de 80 variedades. Es un éxito: vende entre 6000 y 8000 éclairs por semana. En el local hay siempre al menos una docena de sabores distintos para probar: caramel beurre salé (el más vendido), chocococo, limón, maracuyá-frambuesa, entre otros.